La Sala Segunda del Tribunal Supremo ha confirmado la condena de 22 y 20 años para Montserrat González y Montserrat Triana (madre e hija) y eleva de 12 a 14 años la condena para Raquel Gago Rodríguez por complicidad.
El alto Tribunal considera probado que Raquel Gago conoce el delito y lo asume como propio, y “a partir de ese conocimiento, no sólo no lo impide ni trata de evitarlo (…) sino que realiza una acción dirigida, dice el relato, a concretar los detalles, según el plan trazado, esto es, diseña la acción en la fase final de concreción, y se sitúa en una calle determinada en la que esperaría a quien es cooperadora necesaria en la muerte de la víctima (Montserrat Triana), le ve y le abre el coche, para que guardara el bolso en el que iba alojada el arma empleada en la muerte”. Afirma, el Tribunal Supremo, que, aun cuando determinado acto se realice con posterioridad a la consumación de un delito, si quien lo realiza fue partícipe en la organización del mismo, no puede considerarse más que cómplice y no, como alegaba Raquel Gago, simple encubrimiento [Kirian Riquelme Saldivia].
Fuente: Comunicación Poder Judicial.
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