Autora: Vanesa Martí Payá. Profesora de Derecho Procesal de la Universidad de Zaragoza.
Resumen: En el presente trabajo se examinan los problemas que surgen en un proceso de ejecución civil cuando la parte ejecutada es uno solo de los cónyuges por una deuda privativa y, sin embargo, los bienes gananciales de la comunidad se convierten en el objeto del posible embargo. ¿Con qué mecanismos de tutela cuenta el cónyuge no deudor llegado este momento? ¿Cómo puede incidir en el iter procesal? ¿Quién decide sobre la disolución de la comunidad de bienes gananciales? Una vez acordada la disolución de la comunidad de gananciales ¿cuándo se ha de practicar la liquidación? ¿Podría solicitar el ejecutante la liquidación por subrogación? ¿Y de oficio? ¿Podrían verse mermados los derechos de la parte ejecutante? ¿Qué sucede cuando la disolución de la comunidad de gananciales se pretenda invocar con motivo de un embargo preventivo de bienes gananciales? A todas estas cuestiones se pretende dar respuesta y ofrecer propuestas cuando legislador ha guardado silencio.
Sumario:
Planteamiento del problema.
El despacho de la ejecución frente a bienes gananciales.
La determinación y localización de los bienes.
La ejecución frente a bienes gananciales.
III. Casuística procesal de la disolución y liquidación de la comunidad de bienes gananciales.
La disolución de la comunidad de bienes gananciales.
La liquidación de la comunidad de bienes gananciales.
Embargo preventivo y disolución de bienes gananciales.
Referencia: Actualidad Jurídica Iberoamericana, e-ISNN 2386-4567, 2018, julio, núm. 8 bis, pp. 330-345.