En diciembre de 2005 a un joven bilbaíno le fue concedida una hipoteca, si bien en la misma constaban como avalistas los padres y hermanos del joven. Ante los impagos y el aviso de embargo a los progenitores, el padre se vio en la obligación de hacer frente a las cuotas del crédito, ante el temor de perder su propia vivienda.
En este punto el Juzgado de Primera Instancia nº 11 de Bilbao, ha eximido a esos padres del pago de la deuda por entender que la cláusula por la que quedaban obligados no detallaba con claridad las consecuencias de lo que estaban firmando. Con base en ello, el juzgado declara tal cláusula abusiva y nula. [Ángel Bueno Jiménez]
Fuente: Comunicación Poder Judicial.
Acceso a la Comunicación y a la Sentencia
En este punto el Juzgado de Primera Instancia nº 11 de Bilbao, ha eximido a esos padres del pago de la deuda por entender que la cláusula por la que quedaban obligados no detallaba con claridad las consecuencias de lo que estaban firmando. Con base en ello, el juzgado declara tal cláusula abusiva y nula. [Ángel Bueno Jiménez]
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