La menor, de 17 años, no sabe leer, escribir ni tampoco realiza autocrítica alguna, lo que imposibilita la voluntad de cambio; pese a ello, la titular del Juzgado de Menores de Santander, y la Audiencia Provincial de Cantabria, la han condenado a 9 meses de tareas socioeducativas, dado que, y según el testimonio de la víctima, el cual no tiene error alguno y es claro y conciso, fue la joven, acompañada por otra mujer mayor de edad, quien sustrajera su cadena sirviéndose de un abrazo para conseguirlo. La “mera negación del hecho por la menor no introduce dudas que permitan acudir al principio in dubio pro reo, pues la Sala, al igual que la magistrada de menores, no tiene ninguna duda de que la recurrente es la autora del hecho”. [Kirian Riquelme Saldivia].
Fuente: Comunicación Poder Judicial: