La Audiencia Provincial de Cantabria ha confirmado la sentencia del Juzgado de lo Penal nº4 de Santander, condenando a un inquilino a 1 año de prisión y a una multa de 2.250€, por un delito de apropiación indebida y otro de daños, así como a pagar al propietario de la vivienda una indemnización de 6.433€.
Los hechos se produjeron cuando, obligado a abandonar la casa por impagos de renta, el inquilino se llevó algunos muebles, como lámparas, una televisión, la lavadora, la nevera, etc. Además, hizo rayones y pintadas en paredes, puertas, suelo, etc.
La sentencia recurrida entendió que las pruebas aportadas eran suficientes para condenar al inquilino. Dichas pruebas consistieron en las fotografías incorporadas en contrato de arrendamiento y en las fotografías del perito judicial, realizadas 5 días después del abandono de la vivienda.
El condenado interpuso un recurso de apelación, argumentando que las fotos se habían hecho 5 días después del lanzamiento judicial, pero la Audiencia Provincial de Cantabria lo ha desestimado, argumentado que ya en el acta levantada por el funcionario en la fecha del lanzamiento se reflejaba el deterioro y la falta de efectos de la vivienda en ese momento. Afirma, además, que los daños “no son explicables por el simple paso del tiempo, como resulta de los rayones en suelos, fractura del mármol del lavabo, los golpes en las puertas… y lo mismo sucede respecto de la ausencia de una serie de muebles”. [Guillermo Carrasco Gil]
Fuente: Comunicación Poder Judicial.
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Los hechos se produjeron cuando, obligado a abandonar la casa por impagos de renta, el inquilino se llevó algunos muebles, como lámparas, una televisión, la lavadora, la nevera, etc. Además, hizo rayones y pintadas en paredes, puertas, suelo, etc.
La sentencia recurrida entendió que las pruebas aportadas eran suficientes para condenar al inquilino. Dichas pruebas consistieron en las fotografías incorporadas en contrato de arrendamiento y en las fotografías del perito judicial, realizadas 5 días después del abandono de la vivienda.
El condenado interpuso un recurso de apelación, argumentando que las fotos se habían hecho 5 días después del lanzamiento judicial, pero la Audiencia Provincial de Cantabria lo ha desestimado, argumentado que ya en el acta levantada por el funcionario en la fecha del lanzamiento se reflejaba el deterioro y la falta de efectos de la vivienda en ese momento. Afirma, además, que los daños “no son explicables por el simple paso del tiempo, como resulta de los rayones en suelos, fractura del mármol del lavabo, los golpes en las puertas… y lo mismo sucede respecto de la ausencia de una serie de muebles”. [Guillermo Carrasco Gil]
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