En este supuesto el Tribunal de Justicia de la Unión Europea analiza los requisitos necesarios para mantener el estatuto de residente de larga duración en la Unión.
El proceso comenzó por la solicitud de un nacional kazajo de la renovación de su permiso de residencia de larga duración ante el Tribunal de Viena. Se da en este caso la circunstancia de que durante el último año el solicitante había estado únicamente “unos pocos días” en el territorio de la Unión.
Esto podía suponer un problema ya que, de acuerdo con la Directiva de aplicación (2003/109/CE del Consejo, de 25 de noviembre de 2003), relativa al estatuto de los nacionales de terceros países residentes de larga duración., estar ausente del territorio de la Unión durante 12 meses es uno de los motivos que provoca la pérdida del estatuto de residente de larga duración.
A la hora de resolver el supuesto el Tribunal Regional de lo Contencioso-Administrativo de Viena elevó una cuestión al TJUE para que este indicase cuál sería la interpretación conforme con el Derecho de la Unión.
El TJUE finalmente ha resuelto que, aunque la presencia se haya limitado a pocos días, esto no es motivo suficiente para entender incumplidos los requisitos para mantener el Estatuto. Desde el momento en el que un nacional de un tercer Estado adquiere la condición de residente de larga duración tiene los mismos derechos que el resto de ciudadanos miembros de la Unión, teniendo plena libertad para desplazarse y residir fuera del territorio de la UE.
Por lo tanto, siempre que no se ausente durante un período de 12 meses consecutivos (por así fijarlo la normativa), se mantendrá la condición. Sin que exista un período mínimo de presencia en el territorio de la UE para interrumpir dicho cómputo.
Jose Francisco Sánchez Rufino, Becario de Colaboración en el Departamento de Derecho Civil de la UV.
